Me despedí de Pokhara justo el día que se veían las cumbres y fue algo tan imprevisto que no tenía la cámara buena preparada. Emprendí el viaje de 200 kilómetros a Katmandú por 450 rupias, supuestamente iban a ser 6 horas que se convirtieron 11, pa’colgarse. 😦
La experiencia con el transporte y las carreteras de Nepal era tan mala que me daba mucha pereza moverme de un sitio a otro. Cuando te crees que ya has circulado por las peores infraestructuras del planeta y llegas a Nepal, te das cuenta de que no habías visto todo.
La situación es tal desastre que las carreteras de entrada a las dos ciudades principales, Katmandú y Pokhara, son de un carril para cada sentido, en las zonas montañosas Continue reading