Despedida con sabor dulce porque después de un año vuelvo a ver a mi familia y amigos…¡Me muero de ganas!
Despedida con sabor amargo porque en menos de 72 horas dejo atrás un México acogedor que me ha hecho sentir como en casa. Un México que me ha hecho crecer como persona. Un México que me ha dado lo mejor que tiene: su gente, sus paisajes, su música, su comida y mucho más.
No todo ha sido coser y cantar. Lidiar con los taxistas timadores y con una sociedad altamente machista a la par que clasista no siempre fue fácil. Aún con todo y con eso, el sabor de boca que deja México es excelente. Sin duda, México me ha dado una buena lección y es que no puedes juzgar a un país por las noticias que salen en la televisión o en la prensa.
La idea del blog era transmitir que México es mucho más que crímenes, drogas y secuestros. La idea era transmitir que México es un país que hay que vivirlo desde la península del Yucatán, pasando por selva chiapaneca, siguiendo por la cultura indígena de Oaxaca hasta el caos de su capital DF.
La vida sigue. Nuevos proyectos, vivencias e ilusiones vendrán. Hoy, más alto que nunca…¡Viva México! ¡Viva!¡Viva!¡Viva!¡Viva!¡Viva!¡Viva!¡Viva!